El Municipio de Quito ha iniciado la ejecución de obras estratégicas para la reducción de riesgos en diversas áreas de la ciudad, invirtiendo más de 5 millones de dólares. Estas obras se centran en sectores identificados con alta vulnerabilidad a deslizamientos, procesos de erosión y desbordes de quebradas, con el objetivo de prevenir emergencias que puedan afectar a la comunidad y su entorno.
Las intervenciones son realizadas por la Empresa Pública Metropolitana de Logística para la Seguridad y Convivencia Ciudadana (Emseguridad) e incluyen la construcción de muros de contención, estabilización de taludes, canalización de aguas lluvias, y la instalación de subdrenajes, entre otras. Las acciones se llevan a cabo en zonas tanto urbanas como rurales, beneficiando a parroquias como Calderón, Chillogallo, San Juan, y más.
Dentro de los proyectos prioritarios se encuentran intervenciones críticas en Pomasqui y el río Machángara, donde se han presentado deslizamientos significativos y la necesidad de obras de protección. Todos los trabajos están siendo financiados a través de la Tasa de Seguridad Ciudadana, que contribuye al Fondo Metropolitano de Gestión de Riesgos, con el fin de fortalecer la capacidad de respuesta ante situaciones de riesgo en Quito.
